Carmen Romero arropa al nuevo PSOE ceutí en el cierre de campaña

“Es importante estar con los jóvenes de Ceuta, la Europa de la otra orilla”, dijo la candidata, que criticó al PP por buscar “desincetivar el voto” como estrategia

Coqueta, Carmen Romero se bajó del helicóptero, llegó a la sede socialista, se cambió, se arregló y se sentó entre la candidata ceutí que comparte lista con ella a los comicios de mañana, Izaskun Bernal, y el secretario general del PSOE local, José Antonio Carracao, hijos ambos de dos “amigos” suyos. “Es importante estar aquí, en un lugar tan simbólico como Ceuta, la Europa de la otra orilla, con los jóvenes de la nueva generación”, dijo la ex diputada nacional durante 14 años.La número seis de la lista socialista a las elecciones europeas de mañana, Carmen Romero, pasó ayer por Ceuta para arropar al joven y nuevo PSOE ceutí, que cada vez recupera más caras de aquellas que hace sólo seis meses eran tan discrepantes, como pudo verse en el mitin que el partido celebró en el Ulises para cerrar la campaña, y para poner en solfa la estrategia de “desincentivar el voto a la izquierda”, que según lamentó está utilizando el PP, “la derecha”, “los conservadores”, “los que no son europeístas”, para intentar ganar.“Es importante estar aquí, en un lugar tan simbólico como Ceuta, la Europa de la otra orilla, con los hijos de dos grandes amigos y políticos como el senador José Carracao y Carmen Cerdeira”, dijo en rueda de prensa junto a José Antonio Carracao e Izaskun Bernal, que no le regatearon gratitud, elogios ni miradas embelesadas.Ante ellos la que fuera diputada nacional por Cádiz durante 14 años dio una clase magistral de cómo resumir su discurso en tres minutos. Romero advirtió de que mañana se abre “una etapa nueva” en Europa con la expectativa de la pronta ratificación del Tratado de Lisboa, que según anunció propiciará “una mayor articulación política, económica y, si la mayoría en Bruselas es de izquierdas, social”.Por ello pidió a los ceutíes que no atiendan las llamadas a la desmovilización del PP y, al contrario, sumen sus hombros en forma de votos al proyecto europeo para “superar las fronteras del nacionalismo” y atender a “lo que pide la realidad”: “Todavía parece una utopía, pero el proyecto europeo debe crecer, avanzar contra la crisis y en favor del empleo, la competitividad y los estándares europeos; en la Historia no podemos detenernos: o avanzamos o retrocedemos”,